Bitácora del Astromono, día 7 - Misiones Pagadas

La soledad, el olor a metal y a lisoform de la nave y el crujir de cada uno de los huesos de mi rostro al masticar me hunde en los más profundos pensamientos,una vez más. Que paja, dirán algunos. Qué miedo, dirán otros. Si, diría yo. También diría que tengo hambre. Pero como comerse la pasta de dientes le hace pésimo al estómago, el hambre será el estado constante de ésta entrada en la bitácora.

Una oleada de misiones se me ha presentado. Mi carita peluda de mono da sed. Y estas misiones, como sabrán, me están reportando saldos negativos a largo plazo (todo sea por cultivar las habilidades sociales,uh uh)
Sumemos a esto la idea de ir a la gran muestra de material audiovisual del planeta Valdivia-8, a tomarme vacaciones en algún satélite resort por ahí, a mantener mi estilo de vida 3 estratos sociales por sobre lo que debería y al absurdo consumo de sustancias que me mantienen sedado y que NECESITO para poder soportar este viaje de mierda en el espacio. Ah, y los deseos de emancipación.




RESULTADO DE LA SUMA (si, todo eso fue una enorme suma)= necesito dinero





Entonces mañana parto nuevamente en una odisea con un macaco amigo a buscar trabajo; misiones pagadas, se entiende. Deseenme suerte (no lo hagan si leen esto luego del 15/7/14, sería estúpido, ya fuí).
Esperaba, en lo más profundo de mi, en mi eterna y presumida inocencia, nunca volver a trabajar en algo que no sea del rubro en el que estudio. Tonto de mi. uh uh ah ah ah

eterno repudio al trabajo de oficina